viernes, 28 de noviembre de 2008

El Arte Circence se toma el liceo de Lebu!

El profesor Carlos Pino Muñoz se valió del lúdico arte circense para trasmitir rigor y forjar una mejor autoestima a sus alumnos. Haciendo literalmente malabares para mantener en pie el Taller de Circo, el Liceo Isidora Ramos de Lebu es uno de los pocos establecimientos de Chile donde técnicas circenses son parte del aprendizaje regular del alumno.

El proyecto, que incorporó al liceo a la Red de Escuelas Líderes en contextos vulnerables, tiene de cabeza a este profesor nacido y criado en Lebu, quien está empeñado en abrir nuevas posibilidades a los jóvenes de su ciudad.

Ex alumno del mismo recinto donde hace clases desde 2002, estudió ingeniería en ejecución en madera y, tras un breve paso por aulas de técnicos en maderas, decidió ingresar a pedagogía en la sede de Concepción de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación.
Hoy hace clases de educación tecnológica en primero y segundo medio, y es profesor jefe y uno de los encargados del proyecto del circo del liceo.
Consciente de la problemática social de Lebu, Pino quiere contribuir a aumentar las oportunidades de las nuevas generaciones.

Un "Proyecto Montegrande" les había dado los recursos que echaron a andar el sueño, hace ya ocho años. Fue así que, en asociación con el Gran Circo del Mundo, consiguió contar con monitores para dar los primeros pasos formativos.

Cuenta que la idea era ofrecer una actividad que "motivara a los alumnos para que aumentaran su autoestima, en un sector de alta vulnerabilidad social y falta de oportunidades".

En 2008, con varias presentaciones en el cuerpo, el orgullo por el trabajo realizado salta a la vista. Mientras, el proyecto sigue sumando adeptos entre los estudiantes y cuenta con monitores ex alumnos.

Beneficios educativos
Son múltiples los beneficios. Por ejemplo, ha permitido subir la autoestima de los estudiantes. Asimismo, facilita la capacidad de comunicación y el trabajo en equipo como un importante medio de expresión en el establecimiento.

Un convencido de la eficacia de la experiencia artística en relación a la autoestima de los alumnos, subraya lo natural que es -en el circo- vencer obstáculos, persistir en el logro de un fin, reírse y trabajar en equipo:Cuando ellos ven que pueden lograr algo que no podían hacer y presentan su actuación en público, se sienten realizados y uno, como adulto que los acompaña, también.

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